Olvidadas

Rosario Claramunt «Doña Rosa»


Maestra,Periodista,Feminista,Intelectual, Defensora de las Mujeres…

(Casas-Ibañez,Albacete años1920)

Rosario Claramunt Soriano vivió parte de su vida en Alicante pero quizás por motivos de trabajo,se desplazó junto con su hermana y progenitor a Casa-Ibañez. Allí desarrolló una intensa vida profesional,dedicada a sus niñas y a difundir la cultura en su pueblo de adopción.

Periódico «La Voz del Distrito» (20 de junio de 1924)

De Feminismo

En este artículo, escrito en 1924, expone su pensamiento feminista y la importancia que concede a la educación de las féminas.

¿si la mujer hubiese sido educada, atendida y perfeccionada en todos los tiempos, no habría sido tan capaz y tan apta como el hombre para todo?

[…]La escuela sería mi único recurso. Por entonces, ya empezaba a sentir esa profunda e incomparable plenitud que produce la entrega al propio oficio. Me sumergía en mi trabajo y el trabajo me estimulaba para emprender nuevos caminos. Cada día surgía un nuevo obstáculo y, a la vez, el reto de resolverlo […]

del libro «Historia de una Maestra», Josefina Aldecoa.

Fue una persona muy activa, llevó a cabo una intensa labor para promocionar a sus alumnas. Organizó exposiciones con los trabajos de sus «niñas», dirigió obras de teatro, desarrolló sesiones de lectura … Para la puesta en marcha de algunas actividades  consiguió recursos externos de empresas o particulares con el fin de no gravar las arcas públicas y aprovechar al máximo los recursos.De toda esa labor se benefició el pueblo de Casas-Ibañez y hoy las personas mayores del lugar han oido hablar de «Doña Rosa».

En sus escritos se aprecian profundas convicciones religiosas, tanto que para ella fue el lenitivo que le hizo soportar una vida muy dura.Mantuvo una diatriba con Josefa Curet, otra olvidada,  en el  periódico » La Voz del Distrito» ya que la segunda tenía un concepto distinto de la religión.

Creo en mi corazón, ramo  de aromas

Que mi Señor como una fronda agita

Perfumando de amor toda la vida

Y haciéndola bendita.

Creo en mi corazón, el que no pide nada

Porque es capaz del sumo ensueño

Y abraza en el ensueño lo creado

Inmenso dueño. (Gabriela Mistral)

 

Rosario Claramunt es, sin lugar a dudas, una de las primeras, si no la primera  mujer que escribió en un periódico de la provincia de Albacete y lo hizo desde su doble faceta de educadora y de mujer.

[…] mis sueños, vapuleados como estaban, eran los de siempre. Educar para la convivencia.Educar para adquirir conciencia de la justicia.Educar en la igualdad para que no se pierda un sólo talento por falta de oportunidades…[…]

del libro «Historia de una Maestra», Josefina Aldecoa.

En todos sus artículos puso de relieve la importancia de la educación y la instrucción de las niñas así como la necesidad de la participación de las mujeres, junto con los hombres, en el ejercicio de las funciones sociales y políticas con el fin de engrandecer España.

[…]A María le enseñé diferentes clases de puntos, lisos, con dibujos, con calados […] a los pocos días vinieron dos vecina […] mi pequeño grupo de alumnas aumentaba:” enseñe a las niñas”, me decían, “que esto les va a valer más que las letras”… Y una tarde a la semana, en la escuela, inicié a las niñas mayores con una advertencia previa:

–         Las letras y los números y las lecciones que hacemos son más importantes pero también tenéis que saber estas cosas.

del libro «Historia de una Maestra», Josefina Aldecoa.

Doña Rosario Claramunt, maestra nacional, encargada de instruir y educar a las niñas del pueblo de Casas-Ibañez (Albacete) participó en unas jornadas culturales celebradas en mayo de 1924.

El periódico “La Voz del Distrito”  de dicho pueblo destacó, en primer lugar,  el que una mujer interviniera por primera vez en unas jornadas, y en segundo lugar alabó el que fuera pronunciada por una dignísima y culta maestra de dicha localidad.

 

La primera parte de la conferencia versó sobre la importancia de la educación integral como proceso fundamental para la regeneración social y para el progreso de los pueblos. En la segunda parte del discurso se centró en la niñez femenina. Abogó porque las madres se implicaran en la educación, junto a los maestros y maestras. Puso como espejos dignos de admiración a Isabel la Católica, Agustina de Aragón y Santa Teresa de Jesús.

[…]La señora Claramunt puso de relieve de modo induvitable sus grandes dotes de educadora realzados por su talento  y su extraordinario amor a la enseñanza[…]

PERIÓDICO:LA VOZ DEL DISTRITO

(Por medio de este enlace puedes acceder a la página del periódico)

El 20 de junio de 1924 publica en “La Voz del Distrito” un artículo titulado “De Feminismo” conversación obligada de todos aquellos que ven con disgusto que hayan concedido a las mujeres ciertos derechos que ellos sólo se creían obligados a poseer.

En este artículo reconoce el predominio que el hombre tiene sobre la mujer, la superioridad que siempre ha ejercido sobre ella pero se interroga ¿si la mujer hubiera sido educada, atendida y perfeccionada en todos los tiempos, no habría sido tan capaz y tan apta como el hombre para todo?… ¿no han existido mujeres de inteligencia clara, talento admirable e ingenio fecundo?

[…] Aproveche la ocasión para hacerles ver que, a pesar de todo lo que oyeran, el hombre y la mujer no son diferentes por la inteligencia ni la habilidad sino por la fisiología. Se me quedaron mirando con asombro convencidas como estaban de la absoluta superioridad de sus hombres, que lo mismo cazaban jabalíes, que arrancaban los árboles a hachazos. La fuerza física es una cosa, les expliqué. Pero hay otra fuerza que es la que nos hace discurrir y resolver situaciones difíciles.[…]

del libro «Historia de una Maestra», Josefina Aldecoa.

Considera que la mujer tiene como principal misión ser la compañera del hombre y la educadora de sus hijos pero este papel, afirma que,  es un deber impuesto por su propia naturaleza, y por tanto no puede ni debe ser un obstáculo para poder alternar con los hombres, que ella denomina sexo fuerte, en el ejercicio del poder, toda vez que sus facultades intelectuales se lo permiten. Denuncia que muchas de ellas han consumido su vida en las cuatro paredes de un hogar o ha expuesto su vida en los campos de batalla curando a los heridos.

[…] Por primera vez tuve a mi cargo sólo niñas. Se me hacía raro y , al principio, muy ingrato. Había observado en las escuelas anteriores, todas mixtas, que los niños eran más vivos, más rápidos en la comprensión, se interesaban más por todo y no tenían miedo a equivocarse.Las niñas ponían más atención, eran más constantes; trabajaban con paciencia y remataban con finura sus trabajos, pero eran más pasivas.

No son diferentes- le aseguraba a Ezequiel- .Pero respiran otro aire.Las preparan desde la cuna para ser mujeres lo más sumisas posible.Les da vergúenza intervenir, creen que no van a saber, ni poder… […]

del libro «Historia de una Maestra», Josefina Aldecoa.

Actualmente le podríamos hacer muchas y muy duras críticas como, por ejemplo: la importancia que otorga a la naturaleza sin tomar en consideración que la cultura patriarcal impuesta es la que nos ha marcado los papeles a desarrollar.

PERIÓDICO:LA VOZ DEL DISTRITO

(Por medio de este enlace puedes acceder a la página del periódico)

También es criticable toda la carga de valores y de estereotipos que ella misma transmite, no obstante, declara que las mujeres siempre han estado postergadas en prerrogativas de hombres.

Mary Wolstonecraft en “Vindicación de los Derechos de la Mujer” (1792) afirma «Enseñadas desde su infancia que la belleza es el cetro de las mujeres, la mente se amolda al cuerpo y, errante en su dorada jaula, sólo busca adornar su prisión.La implicación de esta afirmación es que, sin el daño ideológico que anima a las jóvenes desde temprana edad a centrar su atención en la belleza y las mejoras exteriores, las mujeres podrían lograr mucho más.

Rosario Claramunt afirma que la mujer, débil por naturaleza,  se adhiere  a la primera mano halagadora que se le presenta, a fuerza de ser centro de atención, de esclarecida ha pasado a pedante. Se premia la belleza corporal y se constituyen reinados efímeros que hacen de la mujer moderna un ser frívolo y superficial  y hay pocas recompensas para un alma sublime.

Tanto una como la otra, separadas por más de un siglo, piensan que esa ocupación y preocupación por la belleza es un daño para la propia mujer porque las convierte en prisioneras y en reinas de la belleza efímera y superficial. Ambas consideran a las mujeres dotadas de cualidades morales que la educación puede poner en valor y acrecentar.

Wollstonecraft mantiene que las esposas deberían ser las compañeras racionales de sus maridos. Apunta que si una sociedad decide dejar la educación de sus hijos a las mujeres, éstas deben estar bien educadas para poder pasar el conocimiento a la siguiente generación.Wollstonecraft declara que las mujeres son estúpidas y superficiales pero dice que no es debido a una deficiencia innata sino a que los hombres les han negado el acceso a la educación.

R. Claramunt, por el contrario, escribe que las mujeres son débiles por naturaleza pero, sin embargo, las cree capaces de las mayores heroicidades y de las más altas cualidades aunque “atraen no por la perfección de su alma y pureza de sentimientos sino por la belleza de su cara y por la libertad de sus actos”

En realidad se dirige a los lectores a quienes recrimina el que únicamente se centren en la belleza de las mujeres.  […] Prémiese en buena hora la beldad física pero dedíquese una atención preferente, ofreciendo lauros y recompensas a la mujer perfecta. . La mujer ha sido creada para fines más altos y delicados ya que como madre transmite la excelsitud del amor: El trono más bello, el más duradero y en el que más se destaca la mujer  es en el hogar como sostén y apoyo. (Periódico “La Voz del Distrito de Casas Ibáñez”24 de octubre de 1930)

Afirma que escribe en representación de todas las mujeres, esta conciencia de pertenencia al grupo desfavorecido la hace participar plenamente de la corriente feminista actual, la de la soridad o sororidad, la de las mujeres enredadas en la red.

 

Con sus luces y sombras, considero que es una pionera del feminismo y una de las olvidadas de la historia de nuestra provincia, pero marcó un camino, una ruta a seguir y probablemente si no hubiera sido mujer y no hubiera escrito en un periódico de pueblo, sus ideas hubieran sido difundidas y hoy tendría todo el reconocimiento que merece.

PERIÓDICO:LA VOZ DEL DISTRITO

(Por medio de este enlace puedes acceder a la página del periódico)

De Rosario Claramunt tuve noticias a través del manchego-andaluz  Francisco Javier Moya, músico metido a etnólogo, como él mismo afirma, al que  le agradezco muy encarecidamente su información.

Este es un pequeño homenaje a una pionera del feminismo, una maestra insigne, periodista y mujer que merece nuestra consideración y respeto.

Contrato de Maestras en 1923

Este es un acuerdo entre la señorita…………………………………………………….maestra, y el Consejo de Educación de la Escuela………………………………..por la cual la señorita ……………………………….acuerda impartir clases durante un período de ocho meses a partir del……………………… de septiembre de 1923. El Consejo de Educación acuerda pagar a la señorita……………………………………………… la cantidad de (*75) mensuales.

La señorita…………………………………………………………..acuerda:

1.- No casarse. Este contrato queda automáticamente anulado y sin efecto si la maestra se casa.

2.- No andar en compañía de hombres.

3.- Estar en su casa entre las 8:00 de la tarde y las 6:00 de la mañana a menos que sea para atender función escolar.

4.- No pasearse por heladerías del centro de la ciudad.

5.- No abandonar la ciudad bajo ningún concepto sin permiso del presidente del Consejo de Delegados.

6.- No fumar cigarrillos. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encontrara a la maestra fumando.

7.- No beber cerveza, vino ni whisky. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encuentra a la maestra bebiendo cerveza, vino y whisky

8.- No viajar en coche o automóvil con ningún hombre excepto su hermano o su padre.

9.- No vestir ropas de colores brillantes.

10.- No teñirse el pelo.

11.- Usar al menos 2 enaguas

12.- No usar vestidos que queden a más de cinco centímetros por encima de los tobillos.

13.- Mantener limpia el aula:

  • Barrer el suelo al menos una vez al día
  • Fregar el suelo del aula al menos una vez por semana con agua caliente.
  • Limpiar la pizarra al menos una vez al día.
  • Encender el fuego a las 7:00, de modo que la habitación esté caliente a las 8:00 cuando lleguen los niños

14.- No usar polvos faciales, no maquillarse ni pintarse los labios.

Grupo escolar en Higueruela 1923

2 opiniones en “Olvidadas”

Deja un comentario